Las bolsas biodegradables compostables, el futuro de la sostenibilidad

Imagen de la noticia

Las bolsas biodegradables compostables, el futuro de la sostenibilidad

22-04-21

El material orgánico se ha convertido en el más contemplado por el sector a la hora de crear productos más viables para el consumo y para el cuidado del entorno de forma más responsable.  

El plástico forma parte de nuestro día a día en numerosos productos. Sin embargo, el planeta pide un cambio en las formas de consumo masivo de la actualidad. Es necesario crear fórmulas más sostenibles y responsables para reducir el impacto ecológico de la ciudadanía, sobre todo ahora que vivimos una pandemia mundial en la que se ha aumentado el consumo del plástico debido a los guantes, las mascarillas, los EPIs o la comida para llevar. Por otra parte, también cabe destacar que la población está más preocupada por la salud o el medioambiente y, por lo tanto, exige alternativas más sostenibles y responsables y demanda sustituir los materiales de origen petroquímico por material renovable y reciclado en su totalidad.
Este 22 de abril, en el Día Mundial de la Tierra, queremos recordar el fiel compromiso de Sphere con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, en este caso el número 12, que busca garantizar las modalidades de consumo y producción sostenibles. Este ODS se ha tomado en cuenta en el modelo de economía circular adoptado por Sphere en su fábrica en Utebo, que pretende sustituir a una economía lineal basada en extraer, producir, consumir y tirar el producto cuando se termina su uso.

El futuro del medioambiente está en nuestras manos. Ahora se utilizan portabocadillos para sustituir el papel de aluminio, las bolsas de tela para transportar objetos o los envoltorios de cera de abeja para sustituir el papel film. Además, a partir del verano entra en vigor la prohibición de la Unión Europea de comercializar productos de plástico de un solo uso, como platos, cubiertos o pajitas. En lo que respecta a las bolsas de plástico, desde 2018 su pago es obligatorio y las empresas deben crear alternativas más sostenibles con un mínimo de 50% de plástico reciclado. En Sphere trabajamos con un mínimo de un 80% en bolsas de salida de caja reutilizables y un 100% en algunas gamas de bolsas de basura. La Comisión Europea quiere que todos los envases plásticos sean reciclables reutilizables a partir del 2030.

Todas estas restricciones, así como las consecuencias del cambio climático, hacen que sea necesario crear productos que tengan el mismo uso, pero más respetuosos con el medioambiente . Para un impacto medioambiental casi nulo, las más recomendadas son las bolsas biodegradables y compostables que permiten su descomposición natural por la acción de microorganismos y hongos. En el caso del Grupo Sphere, comenzaron a introducirse en 2007 y a partir de 2011 comenzaron a desarrollarse a nivel europeo. Las que se fabrican actualmente en Utebo contienen un 30% de materia vegetal (fécula de patata), si bien tienen que alcanzar el 50% que marca la Unión Europea (UE). La meta que se persigue para el 2025 es llegar a prescindir de los materiales petroquímicos en su totalidad y basar la producción en los materiales reciclados y biodegradables. 
 
Estas opciones ecológicas se encuentran presentes tanto en la caja como en las secciones, están ya disponibles en muchos supermercados y se están introduciendo poco a poco en los comercios de los municipios para evitar el consumo de bolsas de plástico de origen fósil. Son la opción más eficiente por ser sostenibles, ecológicas y fabricadas basándose en la economía circular, ya que sirven para transportar los productos frescos y, posteriormente, poder utilizarlas para almacenar la basura orgánica.
Uno de los retos de estas bolsas es el reciclaje, porque no se trata solo de sustituir las bolsas y reducir el consumo de plástico, sino también de reciclar correctamente esos productos. Suele haber confusión con las bolsas de plástico ya existentes, que se depositan en los contenedores amarillos, pero las bolsas biodegradables y compostables están identificadas con un punto de color marrón para saber a qué contenedor hay que depositarlas.